Un jardín con flores de colores complementarios ofrece un efecto visual vibrante y armónico. Al combinar colores que están opuestos en la rueda de colores, puedes lograr un contraste atractivo que realza la belleza de las flores y crea un espacio exterior impactante.
Cómo diseñar un jardín con colores complementarios
- Selecciona flores complementarias: Elige plantas cuyas flores presenten colores opuestos en la rueda de colores, como el amarillo y el morado o el rojo y el verde, para lograr un contraste dinámico.
- Planifica el diseño: Distribuye las flores complementarias en áreas separadas o en patrones que permitan que los colores contrasten entre sí sin saturar el espacio.
- Considera el tamaño y la altura: Asegúrate de combinar flores de diferentes alturas y tamaños para agregar dimensión y profundidad al jardín.
- Cuida el equilibrio: Mantén un equilibrio visual al no sobrecargar el jardín con demasiados colores complementarios. Usa el verde de las hojas y el follaje para suavizar los contrastes.
- Riega y cuida adecuadamente: Asegúrate de proporcionar el riego y cuidado necesarios para cada tipo de flor para mantener un jardín saludable y vibrante.