La puerta de entrada pintada de verde limón en una fachada gris grafito es una combinación audaz y moderna que aporta un toque de frescura y energía al exterior de tu hogar. El contraste entre el vibrante verde limón y el gris grafito crea un efecto visual impactante y contemporáneo.
El verde limón no solo destaca como un punto focal en la fachada, sino que también añade un elemento de vitalidad y originalidad. El gris grafito, por su parte, proporciona una base neutra y sofisticada, equilibrando el diseño y realzando la intensidad del color de la puerta.