El frente de casa minimalista moderno de dos pisos, pintada de blanco, destaca por su elegancia y sencillez. La elección del blanco para la fachada resalta la pureza y luminosidad del diseño, creando una apariencia limpia y espaciosa. Este acabado minimalista aporta una estética contemporánea que se complementa perfectamente con los parasol de madera, que añaden un toque natural y calidez al conjunto.
Los parasol de madera no solo cumplen una función práctica al ofrecer protección solar, sino que también contribuyen al estilo arquitectónico de la casa, introduciendo un elemento texturizado que contrasta con la fachada blanca. El diseño de dos pisos proporciona una estructura imponente y elegante, mientras que el uso de madera en los parasoles añade un toque acogedor y orgánico que completa el look moderno y minimalista de la vivienda.